Casi sin darnos cuenta y hace ya 20 años que abrimos la tienda. Todo empezó a partir de la aficción que , tanto mi marido como yo, siempre habíamos tenido por las cosas de otras épocas, con todo lo que conlleva: su historia, origen, restauración y conservación. Poder recuperar objetos antiguos y darle de nuevo un hueco en nuestra vida, tanto para utilidad práctica como decorativa o ambas cosas a la vez, es una labor que nos apasiona. Lo que empezó como algo para nosotros, comprar piezas para nuestra casa, coleccionar objetos de lo más variado, con el tiempo pasó a ser una dedicación más amplia y, un día como hoy, el 1 de Diciembre de 1990, con mucha ilusión, empezamos esta pequeña aventura. Por nuestras manos han pasado piezas inolvidables e irrepetibles, no tanto por el valor económico sino por su singularidad , belleza, originalidad o rareza.
Buscar, encontrar y comprar es una tarea mucho más agradable y satisfactoria que vender, aunque si no se vendiera no se podría seguir comprando. Pero cuesta desprenderse de algunos objetos tan especiales.
A través de la actividad durante estos años conocimos a mucha gente interesante y disfrutamos de agradables ratos de conversación, compartiendo información sobre nuestras aficciones comunes. Con algunos hemos establecido lazos de amistad y afectividad entrañable. Tenemos cllientes fieles y eso nos produce una enorme satisfacción. Esta faceta humana ha hecho nuestro trabajo mucho más interesante y agradable. Damos las gracias a todos los que nos han seguido y han hecho posible que esta aventura continúe. A pesar de la época difícil que nos está tocando vivir en la economía, la afición sigue ahí. Gracias a todos.
miércoles, 1 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)